La Red de Sindicalistas contra la Violencia Antisindical en Honduras, conformada por las tres centrales obreras (CUTH, CGT y CTH), ACIPARTICIPA y el Centro de Solidaridad AFL-CIO; ante la comunidad nacional e internacional denuncian que la compañera ALBA AZUCENA LÓPEZ, afiliada al Sindicato de Servicios Autónoma de Acueductos, Alcantarillados y similares, SITRASANAAYS y Coordinadora Departamental del Frente Nacional de Resistencia Popular de Francisco Morazán, es víctima de persecución y acoso laboral.
Las autoridades del SANAA, encabezadas por el Gerente de Recursos Humanos, ingeniero Arturo Díaz; el Gerente General, ingeniero Walter Pavón; y la coordinadora de la Junta Interventora, señora Nivida Hernández; pretenden suspender a más de 20 sindicalistas por ejercer el derecho universal a la protesta, como mecanismo para exigir el respeto a sus derechos como trabajadores y trabajadoras.
El 12 de enero de 2016 fue citada para desvirtuar o afirmar si ella incitaba al abandono de los puestos de trabajo, o cerraba los portones para impedir el ingreso de usuarios, a pesar que nunca abandonó su puesto de trabajo y se le siguió dando atención a las emergencias. El mismo día, el señor Gerente de Recursos Humanos le informó de forma oral al Comité Ejecutivo del Sindicato, que a Alba se le iba a suspender sin prestaciones.
Además de este hostigamiento, la señora Alba López fue traslada de puesto de trabajo sin justificación alguna, le dan vigilancia al interior de las oficinas del SANAA y la acosan laboralmente. El señor Gerente de Recursos Humanos se refiere a ella de forma despectiva como “ñangara”, afirmando que hay que “reventarla” por ello, en clara manifestación de intolerancia y estigmatización de la defensoría de derechos laborales.
Hacemos un llamado público a las Autoridades del SANAA, al Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Subsecretaría de Derechos Humanos y demás Instituciones del Estado a tomar las medidas necesarias para detener estos actos de hostigamiento en contra de la señora Alba Azucena López.
Tegucigalpa, 18 de enero de 2016.